Clásicas
En Llegendàrium consideramos leyendas clásicas aquellas que forman parte del patrimonio colectivo de una comunidad concreta, ligadas a una tradición cultural y lingüística que va más allá del ámbito local inmediato. La leyenda de San Jorge, la de la Virgen de Montserrat o la de las Cuatro barras de sangre son buenos ejemplos de ellas en Catalunya, pero cada región y país del mundo tienen las suyas, como la leyenda de los Hijos de la Luna de los Yanomami amazónicos, que nos explica sus orígenes como pueblo, las leyendas del kensei Tsukahara Bokuden, que expresan el concepto japonés del bushi o la leyenda épica del héroe Chi Wara, quien enseñó la agricultura a la comunidad Bambara, en Mali.
Se trata de narraciones que el pueblo ha usado para identificarse con unos determinados valores o ideas que consideraba propios, encontrando con ellas su lugar en el mundo —«somos esto, estamos aquí»— y definiendo las relaciones que establecían con otras gentes. Articulando la identidad de una comunidad —y, por ello, en ocasiones instrumentalizadas como propaganda política—, generación tras generación se ha vuelto a ellas como una brújula.