Los encantats —literalmente “encantados”— son, sin entrar en detalles, más o menos el equivalente en lengua catalana de aquello que en inglés se conoce como fairy, hada, término que actualmente se ha convertido en el más común para hacer referencia a todo el resto de personajes parecidos del folklore europeo, a pesar de las amplias diferencias y los ricos matices de cada uno. En Cataluña, el apelativo hada —fada— se empezó a usar principalmente durante el siglo XIX, primero en ámbitos exclusivamente literarios, pero a causa del cine y la cultura de masas ha penetrado en el ámbito popular.  

Personajes enigmáticos, personificación del misterio, interpretados en ocasiones como relativos al mundo de los difuntos, del destino y los ancestros protectores por antropólogos como la húngara Eva Pócs, de las hadas ha surgido un amplio surtido de personajes de carácter variable o ambivalente, desde las ninfas de las aguas o la doncella del peine de oro, hasta los niños demonio —changelings—, las hadas que piden ayuda a una partera, o aquellos otros que secuestran a un joven a cambio del oro engañoso que se convertirá en cenizas al amanecer. En esta categoría encontraréis leyendas de hadas de Cataluña y de diferentes regiones del ámbito cultural indoeuropeo, donde son preeminentes.